ABC CORDOBA 07-10-2012 página 81

ABC DOMINGO, 7 DE OCTUBRE DE 2012 abc. es sociedad SOCIEDAD 79 EL FIGURA (31- 8- 06) El señor Ramos Braña debió de dejar buen recuerdo. SIN PADRE (28- 2- 35) Franco y sus hermanos no incluyeron a su padre, que andaba con una querida, en la esquela de la madre. TÚ A TU AIRE (20- 2- 10) Manolo, no nos esperes levantado, ya iremos llegando... Tú a tu aire le pusieron sus amigos a Manuel Díaz. NOTA PARA EL MÉDICO (25- 4- 93) Los familiares avisan en la esquela al cirujano. en la que aparecían las dos solas como legítimas. En fin... Cuando murió la madre del Generalísimo Franco, doña Pilar Bahamonde, sus hijos decidieron ponerle la esquela en ABC. Era el año 1934. Todos tenían veneración por aquella dama de cristianas virtudes y quisieron honrarla con devoción. A ninguno de ellos se le ocurrió poner en la esquela a su padre, don Nicolás Franco, que tan mala vida le dio y que andaba entonces arrejuntado con una gallega en un piso de la calle de Fuencarral. En 1934 no sabía el Caudillo lo que aún tendría que aguantar hasta la muerte de su progenitor, a mediados de los años cuarenta. Don Nicolás se amorapiaba más de lo debido y se dedicaba por las barras de las tabernas a insultar a su hijo. Imagínense la escena... Y en los años cuarenta. Ausencias notorias A veces, en las tertulias de la nobleza- -que se siguen haciendo- -sólo se habla de las esquelas de ABC. Por mi paisana doña Soledad hemos sabido lo mal que se portaron- -según sus últimas voluntades- -sus hermanos y su hija. No sabemos, sin embargo, con la calle de Alcalá, que se pagó religiodetalle, lo que se cuece en esas reu- samente y que el carné del que la niones de nobles donde se comenta puso... era falso. por qué en la esquela no ha apareciEn un periódico como ABC hay que do tal hijo o tal yerno, los líos que hay estar siempre alerta por las noches por medio, las agarradas económi- con las esquelas que llegan. Gracias a cas... e incluso más, la pelea de los he- eso, el periódico ha podido dar la prirederos de aquel aristócrata venera- micia de muertes de escritores, políble, historiador por más señas, con la ticos, financieros, artistas... La histocuidadora de su difunto padre, a la ria de ABC está llena de estas excluque ellos no pusieron en la esquesivas que no fueron más que ojo la como su fiel servidora poravizor del que estaba leyenque ella se llevó, en cambio, Se sigue do las páginas del obituadiciendo: Uno un par de magníficas fincas rio. E hizo saltar la liebre. no muere hasta en la Mancha. Así es la vida. Este cronista de hoy dio que no aparece El despecho o la maldad la noticia de la muerte del su esquela en suelen llegar también a este único marido que tuvo CeABC terreno. Hace años- -en la lia Gámez, el doctor Goedécada de los ochenta- -apanaga Alfaro, gracias a que la reció en ABC una esquela impesegunda mujer del difunto, cable de datos, fechas, hijos, hijos po- Mary Cruz Garijo, colocó la correslíticos, nietos, entierro, hora de fune- pondiente esquela. Y así pudimos reral... de un señor que estaba vivo y que memorar lo que fue la boda más pose desayunó esa mañana- -al estilo de pular de los años cuarenta en los JePemán con el ABC en la mano- y rónimos de Madrid y con Millán Astray con su esquela correspondiente. Por de padrino y llamando a la Legión para más que nos movimos no logramos que pusiera orden en la multitud. Casi saber quién fue el artífice de la cana- nada... llada. Sí que se puso la esquela en una Por otro lado, periódico hubo que oficinita de anuncios a comienzos de al nacer y para atraerse a los futuros anunciantes de esquelas, esperaba la primera edición de ABC, las copiaba y no se las cobraba a sus usuarios. Hasta que empezaron a tener problemas, porque no es lo mismo que una esquela salga en ABC que en otro medio. El escándalo mayor lo montó la viuda de un famoso escritor y periodista al ver esa esquela espúrea y creer que la había puesto la amiguita que, según ella, tenía el difunto. Fue tal el alboroto que empezaron a sopesar la validez de sus engaños... Y se retiraron. Una cosa muy seria Hace unos años, en vísperas de los Difuntos, la Asociación de la Prensa de Cádiz- -no podía ser en otro sitio, donde el humor es finísimo- -organizó una mesa redonda sobre este tema en la que tuve el honor de participar. Fue una de las reuniones literarias más divertidas y amenas en las que he intervenido. Y es que morirse es una cosa muy seria y por eso hay que tomárselo con un puntito de humor y de ironía. Con la conciencia tranquila y la esquela asegurada en ABC.