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Bildu, una coalición sin memoria

Garitano encumbra al exalcalde de Azpeitia que se negó a condenar el asesinato de Inaxio Uria en 2008 y forzó la ruptura de la coalición que EA y Batasuna mantenían en el municipio

Bildu, una coalición sin memoria efe

i. reyero

El diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano , de Bildu, designó ayer viernes a su mano derecha y exalcalde batasuno de Azpeitia, Iñaki Errazkin , como nuevo diputado foral de Medio Ambiente. Este cambio en el gobierno de Bildu fue obligado por la oposición de PNV, PSE y PP en Guipúzcoa, que aprobaron una moción de censura contra el anterior responsable de esta cartera, Juan Carlos Alduntzin , por su polémica gestión de las basuras en el territorio.

Pese a que desde Bildu se había señalado que el nuevo diputado de Medio Ambiente sería Haritz Salaberria , el diputado general, en una decisión personal de última hora, sorprendió a todos y designó para el puesto a Errazkin, hasta ahora su jefe de gabinete. En el currículum de Errazkin destaca su corta labor al frente de la alcaldía de Azpeitia, bajo las siglas de ANV, tras las elecciones de 2007 y gracias al apoyo de EA y Aralar, con los que gobernó en coalición.

Del «puñetazo» en la mesa de EA…

Pero el asesinato de Inaxio Uria a manos de ETA , en diciembre de 2008, y la negativa del alcalde a condenar su muerte, hizo saltar por los aires la coalición de ANV y EA en el consistorio. Los de Eusko Alkartasuna no toleraban la callada por respuesta al asesinato de «uno de los nuestros», en alusión a Uria, vinculado con el partido que hoy dirige Pello Urizar. « Ninguna colaboración es posible ni lo será en el futuro , ni en los ayuntamientos ni a ningún otro nivel, con grupos políticos que aceptan en silencio la vulneración del derecho a la vida, y que son incapaces de decir que, por razones tanto éticas como políticas, la violencia no es el camino», dijo entonces, con la herida aún abierta, el presidente de EA Unai Ziarreta.

… al regreso a la sombra de Batasuna

Sin embargo, tres años después y en pos de «los nuevos tiempos», EA ha vuelto a la sombra de la vieja Batasuna y ve cómo la «izquierda abertzale» impone sus nombres en los cargos clave de la coalición Bildu en Guipúzcoa, también ahora en el caso de Errazkin, y les obliga a agachar la cabeza mientras sus socios más radicales califican de «ataque al proceso» la detención del presunto asesino de Uria, el pasado mes.

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