Los espías estrenan «DNI»

Los espías estrenan «DNI», por lo que se ve mucho más avanzado que el actual, pues está pensado y diseñado para «impulsar el empleo y la aplicación de medios electrónicos, informáticos y telemáticos». El Boletín Oficial del Estado de ayer publicó la nueva tarjeta de identificación del personal del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), que será válida durante diez años. Tendrá un formato de 53,98 mm por 85,6 mm con un margen de error de 0,75 mm.

En la esquina superior izquierda del documento se pondrá un Escudo Nacional y a su derecha, en color azul, la leyenda CENTRO NACIONAL DE INTELIGENCIA. Debajo, centradas, las siglas CNI, a mayor tamaño y en el mismo color. Como se ve, aquí también triunfa el azul.

A la izquierda de la tarjeta y «según norma ISO», se situará el «corazón» de la misma: un chip criptográfico. Ya en la zona superior izquierda, aparecerá la fotografía del titular en color y digitalizada, algo que no debe sorprender, claro, porque se trata de una tarjeta de identificación. Entre estos dos últimos elementos, centrado bajo las siglas, aparecerá el escudo del Centro Nacional de Inteligencia. ¿En qué color? Pues en azul, por supuesto, si bien en su variedad «Pantone 304 sobre fondo en Pantone 427». Por si alguien tiene curiosidad, los primeros azules eran «Pantone Process Cyan», lo que cambia una barbaridad la cosa.

Superpuestos al escudo se incluirán los siguientes elementos: el número de identificación del titular, la leyenda EL SECRETARIO DE ESTADO DIRECTOR y la firma de esta autoridad. Finalmente, en la esquina inferior izquierda, se incorporará el holograma del Departamento de Certificación Española (CERES) y en el inferior derecha la leyenda «VALIDO HASTA», seguido de la fecha de vigencia del documento.

En el reverso, sobre fondos de seguridad de color (se supone que azul, claro) «Pantone Process Cyan», el mismo del escudo del CNI, «Pantone Yelow C» (éste se supone que amarillo) y «Pantone 2365» -del que no se especifica tonalidad- figurará una leyenda en la que, entre otras cosas, se advierte de que «cualquier persona o entidad ante la que se acredite el titular de esta tarjeta tiene la obligación de guardar secreto sobre su identidad, y las autoridades y agentes ante los que comparezca la de adoptar las medidas necesarias para la protección de sus datos personales, identidad y apariencia». Normal, porque son agentes secretos.