Amaral: «Las peleas de los políticos son absurdas»
Primera entrevista tras la polémica con Rubalcaba por la canción «Sin ti no soy nada»
Amaral no descansa por vacaciones. Juan Aguirre y Eva Amaral ultiman los preparativos del que será su sexto álbum, «Hacia lo salvaje». Es un verano ajetreado, concierto incluido, pero los de Zaragoza hacen un alto y reciben a ABC en una cafetería del centro de Madrid.
—¿«Hacia lo salvaje»…es?
—Eva: Un poco hacia lo desconocido.
—Juan: Es más un concepto general que sonoro. Es como una huida a una realidad nueva, desconocida.
—E: Creo que en lo salvaje hay muchas cosas que aprender. Igual deberíamos ir hacia la esencia del ser humano, aprender y traerlo aquí, al cemento y el asfalto. Hemos potenciado nuestro lado más cruel y ahora vivimos en una sociedad desequilibrada.
—¿Cómo ha sido la grabación?
—J: Lo hemos grabado en nuestro local con un equipo muy pequeño de gente: Juan de Dios a los controles, Eva y yo con las guitarras, Chris Taylor, un bajista de Londres, y Toni Toledo, batería de Sexy Sadie. Queríamos acercarnos todo lo posible al grupo en directo. Es un sonido bastante reconocible por la voz de Eva y las guitarras. Una vez grabado nos fuimos a un estudio de Nueva York para que sonase lo mejor posible.
—Y editado en sello propio...
—J: En realidad, no hay diferencia a la hora de componer y grabar con estar o no en una compañía. Es una cuestión de evolución: cuando Virgin de-sapareció, empezamos con la idea de crear nuestro sello. En 2007 dimos los primeros pasos y ha sido este año cuando le hemos puesto nombre, Antártida, y lo hemos dado a conocer.
—¿Pensáis editar a otros artistas?
—E: De momento lo vamos a probar en nuestras carnes, y si nos sentimos capacitados ya lo veremos.
—¿Se nota la crisis?
—E: Han bajado los precios de las estudios y demás, pero también han cerrado muchos.
—J: Te da pena ver amigos que son técnicos y se quedan sin trabajo. Pero no es algo que se ciña solo a la música. Donde yo más la he notado es en mi barrio, en Zaragoza, donde veo amigos y familiares que se quedan en paro.
—¿Presionan las expectativas?
—E: Siempre ilusiona que alguien espere. Cuando grabamos el primer disco todo era una sorpresa; pero ahora hay un núcleo de gente y eso es algo que anima mucho cuando se está en el estudio.
—J: Realmente tenemos una sensación de agradecimiento, porque podemos vivir de la música gracias a que nos escuchan; se lo debes. Lo único que podemos hacer es grabar los mejores discos, ofrecer los mejores conciertos y ser todo lo coherentes que podamos en nuestra música y en nuestras opiniones, a riesgo de que a veces se malinterpreten.
—¿Y el resultado final?
—J: Estamos contentos porque se acerca bastante a lo que queríamos. Normalmente funcionamos de forma que cuando estamos de acuerdo es como si se hubieran alineado los planetas: cuando nos gusta a los dos está bien y hasta que ocurre no paramos.
—Solo una cita veraniega, Sonorama
—J: Queremos dar un conciertazo bestial, para que disfrute la gente. Estamos muy agradecidos al festival por contar con nosotros y también por tocar con Teenage Fanclub. Han significado mucho para nosotros en nuestra adolescencia, y creo que será un concierto divertido y enérgico.
— ¿Os preocupan las cifras?
—E: No. Pero estoy ansiosa por ver qué sensaciones causan las nuevas canciones. Plantarme en un escenario con la guitarra y ver qué ocurre. El otro día en Biarritz ya estrenamos dos y me sentía muy bien. Pensaba: «Qué ganas tengo de cantarlas todas». Y eso es algo que queremos hacer en la gira, donde tocaremos todas las del nuevo disco y algunas de anteriores.
—J: Durante las giras nunca hemos hecho el mismo repertorio de una ciudad a otra. Nos gusta cambiar y que la gente que venga, por ejemplo al Sonorama, vea ese concierto como un acontecimiento único e irrepetible.
—¿Qué tal sienta volver a Zaragoza?
—J: Cuando tocas allí sientes unos nervios especiales porque en el fondo es nuestra ciudad. En Madrid también ocurre ahora que llevamos un tiempo, pero Zaragoza siempre es un sitio especial.
—¿Qué sentistéis al ser citada «Sin ti no soy nada» por Rubalcaba?
—J: Me alegra que me hagas esa pregunta porque creo que otra periodista reflejó mal esa respuesta y me causó algunos problemas, incluso recibí insultos. De hecho voy a grabar la respuesta. (Activa la grabadora de su móvil)...Lo que dije es que las canciones son de todos, con lo cual cualquiera puede utilizar una canción tuya o de cualquier artista. Lo puse como un ejemplo de las peleas que suele haber en el Congreso, que no tienen ningún sentido y se alejan bastante de la realidad. El error que cometí se debe a que estaba grabando el disco y había dormido muy poco... lo hice de una forma poco educada. Ahí asumo el mea culpa.
Pero tampoco hice una disculpa. Lo que intenté fue aclararlo y decir que no tengo nada en contra, en lo personal, de ningún político y que realmente como ciudadano no entendía muy bien esas discusiones y esas peleas absurdas que no resolvían los problemas. En ningún momento dije que me pareciese mal que un diputado aludiese a una canción nuestra, a una película, a un libro o a cualquier cosa. Lo que me pareció mal, repito, es que no hablasen de las cosas reales.
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