La dioxina llega a los cerdos
El gobierno alemán asegura que no se ha comercializado carne contaminada
El escándalo alemán del pienso contaminado no remite y el gobierno ha confirmado que las peligrosas dioxinas han alcanzado también a la carne de cerdo, al menos en algún caso detectado en Sajonia Inferior, aunque se asegura que no así al mercado.
En tanto el 90% de las granjas, precintadas la última semana al destaparse la noticia de un nivel inaceptable de dioxinas en huevos y aves de corral, han vuelto a reabrirse a la venta y sólo 560 permanecen vetadas para el mercado.
Pero el desprestigio y la incuria política han hecho estragos y numerosas voces reclaman responsabilidades al gobierno, coincidiendo con la asunción por parte del ministerio federal de Agricultura de que también al menos un cerdo, sito en una explotación agrícola del distrito central de Verden (Baja Sajonia) habría sido contaminado.
No ha llegado al mercado
El ministro regional asegura en NDR que el cerdo habría sido sacrificado el 29 de diciembre, aunque la explotación tardó aún varios días en clausurarse por lo que un veterinario ha sugerido que, en tanto, otras carnes podrían haber llegado al público. Pero el ministro ha insistido en que ninguna carne de cerdo procedente de granjas que recibieron el pienso sospechoso habría alcanzado los estantes.
Según el portavoz de agricultura, todos los cerdos de la mencionada granja afectada, en número de centenares, han sido ya sacrificados y se están repitiendo controles en una segunda granja, donde se han hallado valores de dioxinas en el límite de lo permitido. Los niveles revelados días antes en algunas aves, que comieron un pienso contaminado con aceite industrial, habían sido 77 veces superiores a lo permitido para el consumo.
Cancelación de las importaciones
El escándalo ha visto cancelar las importaciones alemanas y decrecer notablemente el consumo de aves, huevos y carne de cerdo entre la población, una vez sabido que las dioxinas podrían estar relacionadas con abortos y desarrollos cancerígenos ulteriores . Entre los pocos ganadores se encuentran los productores ecológicos, que según el sector habría visto aumentar su venta de huevos un 30%.
Entre tanto, miles de los 5.000 criaderos precintados han visto levantada la prohibición y han retornado al mercado con sus productos. El escándalo saltó al descubrirse que el origen del alto nivelo de dioxinas en productos avícolas profenía del pienso del fabricante alemán Harles & Jentzsch. La Fiscalía investiga a la fábrica productora de piensos, para determinar si utilizó errónea o conscientemente en sus piensos el aciete para fines industriales.
Contra la ministra de Consumo
Pero el dedo acusador se ha tornado igualmente contra la ministra federal de Consumo, Ilse Aigner, y todos los partidos exigen consecuencias tras la crisis. La oposición acusa al gobierno de haber reaccionado con medidas inconcretas, pero la ministra no ha tenido inconveniente en declarar que "creo que lo hemos hecho muy bien", durante una sesión extraordinaria de la comisión de consumidores en la Cámara baja del Parlamento alemán (Bundestag).
El gobierno regional de Renania-Palatinado (SPD) ha criticado abiertamente que lo que la ministra Aigner (CSU) "está haciendo y lo que propone es absolutamente insuficiente", según los ministerios locales de agricultura y consumo. Los responsables regionales acusan a Aigner de esconderse, señalar luego a las regiones y por fin pedir propuestas a los propios fabricantes de piensos, que han sido parte del problema.
El gobierno socialdemócrata en Maguncia exige nuevos controles sobre los permisos y una separación completa entre grasas de uso industrial y con destino a la cadena alimentaria, así como condiciones y pruebas estandar, previas y posteriores, para lo que llama a convocar una conferencia de ministros regionales de agricultura y consumo.
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