«Molto longos»
«Noventa minuti en el Bernabéu son molto longos». El domingo, Zapatero recuperaba sin pensarlo la invocación a la épica de la remontada que Juanito formulara hace 25 años, en una macedonia lingüística tan chapucera como inequívoca. En política, un año y medio es mucho tiempo, aseguraba el presidente del Gobierno. Pero aquel Real Madrid de las hazañas improbables, que salía vapuleado en Milán, Bruselas o Derby para después superar los resultados adversos en un ejercicio de voluntad colectiva y de conexión emocional con sus hinchas, era una anomalía. Con el tiempo, restablecida la lógica de la normalidad, fue el Real Madrid a quien noventa minuti en el Bernabéu se le hicieron molto longos en demasiadas ocasiones.
De forma que, ¿para quién va a resultar interminable el resto de legislatura, para el PP o para el propio PSOE? El Zapatero de hoy, goleado en tantos campos, invoca la épica de la remontada más bien como una cláusula de estilo. Como una obligación retórica. Simplemente, no puede afirmar lo contrario. Aunque no resulta improbable que lo crea realmente, dada esa inagotable confianza en sí mismo que ya es incapaz de transmitir a militantes y electores. El gobierno de hoy se parece muy poco a aquel Real Madrid imposible. Carece en su alineación de jugadores talismán y la estampida de seguidores consternados, defraudados o sencillamente aburridos con su juego vacía su estadio.
El resto de la legislatura puede resultar largo para el PP, y con él para millones de ciudadanos hastiados. Pero puede ser interminable para el partido del gobierno. Nos acercamos al punto, si no hemos llegado ya, en el que lo improbable se convierte en imposible. Y la innecesaria prórroga de una legislatura agotada puede pesar como una losa más sobre el futuro de un socialismo necesitado de una renovación urgente que sobre las expectativas electorales de la oposición.
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