«¡Qué mal lo va a pasar!»
El presunto líder de EKIN, Eneko Compains Silva, ha acompañado a la Guardia Civil en varios registros mientras grupos de radicales le mostraban su apoyo

Era el presunto “jefe” de la dirección nacional de EKIN, el entramado político “más duro” de ETA según el Ministerio del Interior. Ilegalizada en 2007 por la Audiencia Nacional, EKIN nació con el objetivo de “sustituir a KAS”, la organización que tradicionalmente codirigía junto a ETA la estrategia terrorista e impulsaba al resto de colectivos vinculados a la banda. EKIN fue definida entonces por los jueces como "parte de las entrañas de ETA".
Eneko Compains Silva, nacido en 1981 y vecino de Pamplona, fue arrestado hoy en Cariñena (Aragón) dentro de la operación llevada a cabo contra la cúpula de EKIN cuando regresaba, al parecer, de “unas vacaciones” en la Comunidad Valenciana. En total fueron detenidas ocho personas más, dos de ellas en la Comunidad foral: Rosa Iriarte Laset; y José Aldasoro Jáuregui, cuyo hermano Juan Cruz, ex miembro de Batasuna, fue arrestado en Etxarri (Navarra) por intentar evitar que los agentes se llevaran a su hermano de casa.
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Eneko Compains Silva fue arrestado hoy en Cariñena (Aragón)
uentes policiales señalaron a ABC que el presunto líder de la organización cuenta con numerosos antecedentes por “pintadas, colocación de carteles proetarras y desórdenes públicos desde que estudió en un instituto del barrio de Iturrama”, en la capital navarra. También se le relaciona con la “actividad política” de EKIN, la dirección de numerosas iniciativas para promover la “movilización de la izquierda abertzale juvenil” y “otros colectivos como el grupo de familiares de presos etarras Etxerat”. Pero esta vez, las acusaciones son más graves. Desde Interior se afirma que los detenidos “ayudaban a los etarras huidos que querían integrarse en las estructuras de la banda en Francia” y se encargaban de “la organización del Gudari Eguna”, el homenaje anual a los terroristas fallecidos previsto para el próximo día 27.
Además, EKIN también lleva a cabo otras misiones de apoyo a ETA como “la transmisión de directrices y documentos de la banda al resto de organizaciones de la izquierda abertzale”, la “difusión de documentos internos de ETA, como Zutabes”, “la codirección de todo el entramado terrorista” o la puesta en práctica de “métodos de coacción y violencia complementarios” a los de ETA, entre otras. Sus miembros “instrumentalizan el complejo organizativo de la izquierda abertzale al actuar como comisarios políticos delegados por ETA” y ejecutan y dirigen las estrategias de “construcción nacional” establecidas por los terroristas.
Los registros
Apenas unas horas después de que fuera detenido, Compains era visto de nuevo en Pamplona avanzada la mañana, custodiado por numerosos efectivos de la Guardia Civil que registraron dos pisos, uno de ellos en la calle de la Estafeta, donde al parecer vivía el presunto cabecilla de EKIN; y un local situado junto al número 32 de la calle de Río Ega. Fue en ese lugar donde se vivieron los momentos de mayor tensión. Tras acordonar un perímetro de unos 200 metros, los agentes, entre los que había miembros de la Policía Científica ataviados con buzos blancos, entraron a un bajo en busca de “pruebas que permitan corroborar la vinculación de los arrestados con el entramado etarra”. Compains, esposado, les acompañó al interior del local, donde permanecieron en torno a una hora y quince minutos.
Treinta simpatizantes, familiares y amigos de Compains le mostraron su apoyo
Entre tanto, una decena de vehículos de la Guardia Civil permanecía en la calle. Poco a poco, unos treinta simpatizantes, familiares y amigos de Compains fueron llegando al lugar para mostrarle su apoyo. “¡Qué mal lo va a pasar!”, exclamaba compungida una allegada al joven. Los nervios se acrecentaron cuando un agente comenzó a grabar con una videocámara a los presentes y el presunto líder de EKIN salía del local escoltado por los efectivos, que portaban cajas de cartón con diversa documentación recopilada. Apenas se le pudo ver el rostro, ya que los guardias civiles lo cubrieron con un escudo mientras le introducían en uno de sus coches. “¡Aupa Eneko!”, “¡Aquí se tortura, como en la dictadura!” o los típicos “¡Txakurras!” (“perro” en euskera) fueron los gritos más proferidos por los simpatizantes de EKIN.
Además, tras levantarse el dispositivo se escucharon insultos como “¡hija de puta!”, dirigidos a una representante judicial. En ese instante, un par de jóvenes dieron varios golpes al Nissan Patrol donde viajaba Compains, lo que propició que un agente tratara de identificarlos. “¡Ven tú a por nosotros!”, le respondió uno de ellos mientras huía. Acto seguido, los presentes se dispersaron pacíficamente sin que se registraran nuevas detenciones.
Importancia de la operación
Interior añade que, de acuerdo con las investigaciones policiales llevadas a cabo hasta la fecha, la desarticulación de EKIN supone la desactivación de una organización “de enorme importancia para ETA”, puesto que se trata de la “columna vertebral” de la izquierda abertzale, es decir, la parte del cuerpo de ETA-EKIN que garantiza “la constante activación y operatividad de los distintos grupos que forman el entramado de la banda terrorista”. Por ello, los especialistas de la Guardia Civil consideran que esta operación supone un “golpe de gran calado” contra la capacidad de ETA para ejercer su mando sobre las organizaciones vinculadas a la banda.
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