CUMPLE CINCO AÑOS

La Alianza de Civilizaciones: mucho ruido y pocas nueces

El proyecto internacional estrella de Zapatero cumple hoy cinco años con su efectividad cuestionada y con el liderazgo del presidente español puesto en entredicho

La Alianza de Civilizaciones: mucho ruido y pocas nueces AFP

Á.C.j

13/07/2010
Actualizado 19/10/2015 a las 13:19h.

«Como representante de un país creado y enriquecido por culturas diversas, quiero proponer ante esta asamblea una Alianza de Civilizaciones entre el mundo occidental y el mundo árabe y musulmán. Cayó un muro. Debemos evitar ahora que el odio y la incomprensión levanten otro», declaraba Rodríguez Zapatero ante la Asamblea General de Naciones Unidas en 2004 . En este discurso, el presidente del Gobierno español afirmaba que en el mundo no habría seguridad ni estabilidad «mientras sangre el conflicto de Oriente Próximo, que es el tumor primario de múltiples focos de inestabilidad».

Como resultado de ese deseo de conseguir una seguridad mundial, España y Turquía crearon la Alianza de Civilizaciones, que hoy cumple cinco años tras ser asumida por la ONU.

La Alianza fue lanzada como uno de los proyectos estrella del presidente Zapatero , quien consideró aquella iniciativa como su oportunidad de oro para que España cogiera la batuta del liderazgo internacional y adquiriera un prestigio en el orbe político que permitiera al gobierno progresista de Zapatero hacer historia. Ese liderazgo progresista que más tarde compararía Leire Pajín con el ejercido por Obama en Estados Unidos.

La fecha en la que Zapatero anunció el proyecto de su Alianza de Civilizaciones no era casual. La guerra de Irak estaba en boca de todos y seis meses antes España había sufrido los trágicos atentados del 11-M. «La paz es la tarea. Una tarea que exige más valentía, más determinación y más heroísmo que la guerra. Por eso las tropas españolas regresaron de Irak», afirmó en su discurso Zapatero.

Entre las palabras y los hechos

La Alianza de Civilizaciones, y en palabras del Alto Representante de la ONU para esta plataforma, Jorge Sampaio, se ha erigido como el «principal promotor del diálogo entre culturas». Sin embargo, son muchas las críticas que ha recibido la Alianza .

En primer lugar, las profecías de un cambio internacional preconizado por Zapatero no se han cumplido en la práctica. Y lo

Los resultados no se corresponden con unas medidas anunciadas a bombo y platillo

que es también grave; las medidas no han calado en la sociedad, pues se ha comprobado que las disposiciones de la Alianza no despiertan interés ni en los ciudadanos ni en los ayuntamientos .

Quienes en su momento depositaron en Zapatero sus esperanzas sobre un cambio internacional esperan ahora resultados concretos de la Alianza, no mediante proyectos abstractos, sino con medidas reales asentadas en el suelo que correspondan al «amplio reconocimiento internacional», que según el Gobierno, ha obtenido la Alianza.

Polémicas relaciones internacionales

Por otro lado, las relaciones internacionales de España son cuestionadas por más de uno. Más en concreto, tener a Irán en el «Grupo de Alto Nivel» hace pensar si el proyecto de diálogo de Zapatero no es más que una utopía, mientras la tensión internacional crece en torno al potencial nuclear iraní y al terrorismo internacional que sigue azotando Oriente Medio, Oriente Próximo y África.

Las intenciones del gobierno socialista, aparte de fomentar la cooperación internacional, es ampliar al pacto antiterrorista al terrorismo islamista . Sin embargo, en este complejo diálogo internacional entre civilizaciones aún muy distantes, como en cualquier otro diálogo, se requiere estar abierto al debate y a la cesión de condiciones, algo que ahora se antoja harto complicado

Muchos consideran la Alianza como una mera estrategia de propaganda internacional

vistos los acontecimientos. Se han levantado por ello voces, cinco años después, que consideran, según ellas, esta acción propagandística de imagen del Gobierno como algo prescindible.

Cinco años después, la utopía de la Alianza de Civilizaciones, siempre con un humus de realidad, despierta dudas sobre si supone un acto (muy costoso) para la galería de fotos del presidente Zapatero o si, por el contrario, significa un proyecto real de un cambio sostenible en el tiempo en la colaboración entre Occidente y los países islámicos. Un cambio, por otra parte, cada vez más necesario para la convivencia y la seguridad en nuestro mundo y sus diversas civilizaciones.

Los miembros y «amigos» de la Alianza

Desde que naciera la Alianza han sido numerosos los países que han secundado la iniciativa. Hoy día, la Alianza está compuesta por el llamado «Grupo de Alto Nivel» , en el que se hallan miembros provenientes de España, Turquía, Irán, Qatar, Túnez, Egipto, Marruecos, Senegal, Sudáfrica, Rusia, Uruguay, Pakistán, India, Brasil, Indonesia, China, Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos. Además, la Alianza está secundada por plataformas como la Organización Islámica para la Ciencia la Cultura y la Educación (ISESCO), la UNESCO o la Liga Árabe, entre otros.

También existe un numeroso «Grupo de Amigos», formado por 70 países y 13 organismos internacionales, que apoya políticamente la Alianza. Entre estos países se encuentra Estados Unidos, que decidió avalar este «foro de diálogo intercultural» hace tan sólo dos meses , y a pesar de las diferencias que separan al gobierno americano del español en materia de energía nuclear.