Aplausos unánimes, abundantes bravos y algunos abucheos cerraron el viernes el estreno en Francia de «Die Feen» (Las Hadas) (1833), ópera de juventud de Richard
Wagner (1813-1883), vista por el director de escena Emilio Sagi y el director de orquesta Marc Minkowski.
El público celebró unánime la dirección musical de Minkowski, la orquesta y el Coro des Musiciens du Louvre-Grenoble -en el que participa la mujer de José Luis Rodríguez Zapatero, Sonsoles Espinosa-, dirigido por Nicholas Jenkins.
Ovacionó también con especial énfasis a la soprano Christiane Libor por su papel de «Ada», la hija del rey de las hadas. Los aplausos decayeron levemente con el tenor William Joyner, pese a su admirable interpretación de hombre dolorido, enamorado hasta la locura, ya que en algunos momentos hizo gala de cierta fatiga vocal.
Para Emilio Sagi, que salió a saludar junto con varios miembros de su equipo, entre ellos el escenógrafo Daniel Bianco y el autor del vestuario Jesús Ruiz, hubo aplausos, bravos y algunos silbidos y abucheos. Sagi quiso ilustrar su impecable trabajo escénico con una estética audaz, entre pop y fallera, festiva y onírica.
No hubo, en cualquier caso, pataleos ni gritos ni violentos abucheos como otras veces se ha visto en este mismo teatro ante otros montajes wagnerianos, informa Efe.